¿Querés saber cómo consiguen sus metas los grandes líderes y deportistas?
Te lo explico muy fácil en este posteo.
Manifestar es volver realidad una idea, es concretar eso que tenés en la mente mediante la realización de tus acciones, aplicando la técnica mental de entrenar intencionalmente tu cerebro para creer en algo que todavía no existe, como si ya lo hubieras logrado.
Cuando pensamos en la palabra manifestación, tal vez lo primero que se nos viene a la cabeza es una persona vestida de hippie hablando de la ley de la atracción, pero en verdad no se trata de magia, ni tampoco de pensar en algo muy concentrados y esperar que se vuelva realidad cruzando los dedos o pidiendo deseos al cielo, manifestar es una herramienta respaldada por las neurociencias que utilizan los lideres, atletas y científicos.
Manifestar es una herramienta de poder respaldada por las neurociencias para reprogramar tu cerebro.
Te ayuda a lograr tus metas porque al manifestar, es decir, al concentrar tus energías, tu intención y tus acciones en lograr algo, recableás mente, cuerpo y espíritu para ayudarte a hacer el trabajo para que cumplas tus sueños. Sí, vos tenés que hacer el trabajo, por eso no es magia. Para lograr tus metas, tenés que comprometerte a enfocar tus acciones y ser constante.
Lo que te frena y te tiene estancado en cualquier situación, normalmente es una conversación que estás teniendo con vos mismo, no te detiene algo externo, no viene de afuera, tus límites son internos, pero esa charla negativa interna se detiene cuando practicás la manifestación, porque tu cerebro se reprograma para pensar, sentir y actuar distinto. Vas a empezar a trabajar en tu beneficio, a jugarte a favor y no en contra.
Una de las técnicas principales de la manifestación es visualizar eso que querés lograr para creerte capaz de conseguirlo; al imaginar la situación deseada, te ordenás y alineás tus acciones alrededor de ese resultado que esperás conseguir, es decir, al visualizar, podés ver cómo lograrlo y trabajar en consecuencia.
TIP: Es muy útil visualizarte haciendo el trabajo más pesado, el que no te gusta y te parece aburrido, para que llegado el momento, ¡lo hagas!
Como visualizar en realidad se trata de una tarea multisensorial, muchos entendidos prefieren usar el término imaginación antes que visualización. Los atletas olímpicos utilizan las imágenes como entrenamiento mental. Emily Cook, atleta olímpica estadounidense de vuelo libre, ha dicho: «Para mí, la visualización no abarca todos los sentidos, además de visualizar tenés que poder olerlo, tenés que poder oirlo, tenés que sentirlo todo”.
Y hablando de imaginar, no puedo dejar de mencionar la frase más conocida de Albert Einstein: «la Imaginación es más importante que el conocimiento».
También desde el lado científico, Srini Pillay, profesora clínica de Psiquiatría en la Facultad de Medicina de Harvard, afirma: “La visualización y la acción están íntimamente conectadas e involucran la corteza motora. Pensar en nuestro cuerpo haciendo algo (levantar un brazo o caminar hacia adelante) activa la corteza motora directamente.” Imaginar nos permite recordar y ensayar mentalmente nuestros movimientos previstos, de hecho, visualizar el movimiento cambia la forma en que se organizan nuestras redes cerebrales, creando más conexiones entre diferentes regiones.
Según la Universidad de Colorado, una nueva investigación sobre imágenes cerebrales muestra que imaginar una situación ilumina regiones similares a las de experimentar la misma situación. «Esta investigación confirma que la imaginación es una realidad neurológica que puede impactar nuestros cerebros y cuerpos de maneras importantes para nuestro bienestar», dijo Tom Wager, director de la investigación. Wager recomienda que prestes atención a lo que imaginás: «Administra tu imaginación y lo que te permitís imaginar. Podés usar la imaginación de manera constructiva.»
La técnica correcta:
Podes saber más sobre el método que yo utilizo en este posteo.
Para manifestar, la herramienta clave es visualizar de manera precisa, intencional y con un propósito. Cuando te visualizas alcanzando tus metas, tu cerebro interpreta esas imágenes como experiencias reales, y cuanto más repitas la visualización, más se afirma en tu cerebro.
Se trata de ver en tu cabeza eso que querés crear en tu vida, imaginalo hasta que se vuelva tan real que puedas experimentarlo con todos los sentidos, que lo podés tocar, ver, oler. Se lo más específico posible.
Imagina que tu «yo futuro» ya alcanzó la meta y observá cómo se siente y qué acciones tomó para llegar hasta allí. Después, trabajá para adoptar esas mismas actitudes y acciones en tu vida presente. Pensá cómo te sentirás una vez que hayas alcanzado tu meta. Conéctate emocionalmente con ese estado para fortalecer tu compromiso y motivación. Utiliza afirmaciones positivas y en tiempo presente que refuercen tu creencia en la realización de la meta. Repetí estas afirmaciones diariamente para programar tu mente inconsciente.
Personalmente, a mi me gusta hacer mis visualizaciones cuando medito, para estar extra enfocada, como te cuento en este posteo sobre Meditar.
Espero que te haya resultado útil esta información, y si te gustó el posteo dejame un comentario abajo.
Acordate que tenés todo el poder para cambiar tu vida adentro tuyo, es cuestión de decisión y compromiso. Yo creo en vos.
Con todo mi cariño,
Tu coach
Aixa
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